martes, 17 de febrero de 2009

I HAVE FULLY COME OUT OF THE CLOSET- Cap 8 – Hasta la vista Sagittaria


Bien, luego del furioso lapsus anterior he decidido continuar con la historia.
Nada raro, termine la secundaria, Mauro seguía siendo mi amigo pero era como un pasado cercano, no me motivaba ni siquiera verlo, el acne erradicado, el cuerpo se estilizo de una asombrosa manera (sigo afirmando que fue el apio y la cebolla (a pesar de la internación por quedarme sin defensas). Claro que también ayudaron los 8 litros de agua diarias que bebía, los metros de papel films que rodeaban mi cuerpo para transpirar mientras andaba como loca en la bicicleta por la ruta que bordea el pueblo, y además natación y complementos de pesas (sí mierda!! antes se llamaba así COMPLEMENTO DE PESAS). De golpe desaparecieron 35 kilogramos, la piel se volvió porcelana, en definitiva me sentía integrado a una sociedad que miraba con asombro al gordito pelotudo que había crecido.
El tema era que, a días de terminar la secundaria, no sabia que mierda hacer de mi vida, imagínate que en Sagittaria no me quedaba ni en pedo. ¿Qué iba a hacer allí?, ¿pastorear ovejas? ¿Ordeñar vacas? ¿Masturbarme cinco o seis veces al día para saciar los repentinos calores que me aparecían de la nada? ¿Matar a mi abuelita para que exista un poco de emoción en ese pueblo? No, debía buscarme un lugar en el mundo, en realidad; MI LUGAR EN EL MUNDO.
Siempre me gusto el mar e inmediatamente pensé en irme a PUERTO MADRYN a estudiar oceanografía; creo que hasta el día de hoy no pusieron la carrera, entonces; a la mierda la posibilidad de tener sexo con un cangrejo, asistir el parto de una ballena y muchos menos bucear todos los días en Puerto Pirámides soñando que NEPTUNO me llevaría a su mundo. El sur quedo descartado. (por ahora porque hay otro capitulo de mi vida allá).
Muchas opciones de estudio no tenia, mi madre diciéndome que haga lo que me haga feliz (esas palabras que dicen y después se arrepienten toda la vida!!!).
Yo conocí Buenos Aires cuando, como loca desatada; vine a ver a TINA TURNER; me fascinaba la voz, las piernas y la actitud de la octogenaria (creo que en realidad me gustaban más sus taco agujas infinitos y esas minifaldas estupendas que usaba). Buenos Aires me cautivo, no sé si como una gran ciudad (más allá de mi origen pueblerino) sino por su noche. Yo era un chico que se deslumbraba terriblemente por todas las luces que veía encendidas, por los carteles, las marquesinas en los teatros, tantos autos juntos, tantos negocios de ropa y boludeces, tanta gente corriendo hacia la nada, tantas urgencias innecesarias pero, sobre todo esa primera vez que vine para ver a la oscura cantante, quede fascinado de ver tantos hombres!!! qué encima me miraban. Idiota como siempre y en compañía de mi abuela (en realidad la tendría que haber matada, viaje con ella) yo me ponía púrpura de la vergüenza que un hombre me mire, y te miraban de una forma que hacian palidecer tus formas!! No eran miradas, eran violaciones. Claro era la década del 80, empezaba una liberación casi total y se notaba, se notaba mucho.
Recordando aquel recital, una noche después de cenar le dije a mi madre y mis hermanos: - Me voy a Buenos Aires a estudiar.
- Ah bueno – dijo mamá – ¿estudiar qué?, y ¿dónde vas a vivir?
- Bueno ma, no seas así, estudiar veo que estudio y vivir este… que se yo… en una pensión para estudiantes… no sé, supongo que la gente de acá, que va allá, vive en algún lado… -expresé
- Claro – siguió mi madre – pero te repito ¿dónde vas a vivir VOS ? A una pensión ni se te ocurra, ni loca te dejo ir! Te crees que vas dormir en cualquier sucucho lleno de piojos, con gente que no sabes de donde es, ni conoces, vos sos chico todavía!! Por favor!!!
- Mamá. Déjate de joder tengo 18 años
- 17 todavía faltan 15 días para tu cumpleaños.A una pensión no vas y punto. Además estuve todo el año diciéndote que averigües carreras, que veas que te gustaría estudiar, te mande a la psicóloga por el test vocacional que me salio una fortuna ¿Fue todo al pedo?. Estamos en diciembre hijo! ya cerraron las inscripciones en las universidades!
- Sólo te digo una cosa, ni loco me quedo un año más acá, yo me voy a buenos aires y veo que hago – le dije, mientras el pelotudo de mi hermano se reía y decía – se queda una año más, se queda un año más ja-ja-ja-ja-ja- (¿Por qué no lo ahogue cuando nació?, ¿será por mi eterna santidad?) y la tarada de mi hermana envuelta en llantos me decía- no te vayas, no te vayas!

¡ Qué calvario! ¿Por qué esta guerra psicológica?
– pensé mientras me levantaba de la mesa masticando media milanesa de pollo que, por supuesto, me cortaba la respiración.

- Nene, no seas mal educado!! Hablemos! Vení para acá! –gritaba mi madre.
- ¿Qué querés que hablemos? Eh? – le dije fastidioso
- Estaba pensando, que sé yo, se me ocurrió ahora, que esta tu prima en Buenos Aires; Julia, podes hablar con ella y ver si al menos pasas un tiempo en su departamento y después vemos, no te parece?

En ese momento vi descender sobre mi madre un aura blanca, una luminosidad absoluta. Mis ojos se llenaron de luz y sentí ese maravilloso invento de… que sé yo de quien, pero la madre es un invento de alguien y por supuesto una construcción de los hijos (esto lo desarrollare más adelante, no sea cosa que mi madre se lleve todos los créditos). La vi como a una mujer santa, la salvadora de todo, la que realmente me había parido y me seguía dando fuerzas, algo así como una SOLUCIONADORA de problemas del ex gordito pelotudo.

- ¿Qué pensas? Te quedas, visitas algunas universidades, fíjate que te gusta y después viajo yo y si te adaptas, alquilamos un departamento para vos solo, no esta bien así?
- Sólo atine a un beso y decirle: - me parece perfecto – mientras pensaba en la ropa que llevaría, las calles que caminaría, que carrera elegiría, y en los hombres, pensaba en todos los hombres que podría mirar sin culpas y con deseo… con mucho deseo.

A la mañana siguiente cuando me levante (YA QUE NO PEGUE UN OJO EN TODA LA NOCHE) llame a mi prima Julia para contarle las buenas nuevas. Ella acepto feliz que me instalase en su departamento. Definitivamente en Buenos Aires mi vida cambiaría para siempre y la de unas cuantas personas tambien.